Ferreras Amez JM, Abada Gallego V, Aldea Molia E, Ortega Jimenez N, Sanjuan Domingo R.
fml. 2013; 17(3):3p
descargar pdf
No dejes para mañana lo que puedas tratar hoy.
Do not leave for tomorrow what you can try today.
José María Ferreras Amez1, Víctor Abadía Gallego2, Elisa Aldea Molina1, Noelia Ortega Jimenez1, Raquel Sanjuan Domingo2.
1.- Especialista en Medicina Familiar y Comunitaria. Servicio de Urgencias Hospital Royo Villanova. Zaragoza.
2.- Especialista en Medicina Familiar y Comunitaria. Servicio de Urgencias Hospital Migule Servet. Zaragoza.
Correspondencia: Dr. José María Ferreras. chemaferreras@hotmail.com
Recibido el 30/08/2012
Aceptado el 1/10/2012
Publicado el 29/01/2013
Citar como: Ferreras Amez JM, Abadía Gallego V, Aldea Molia E, Ortega Jimenez N, Sanjuan Domingo R. No dejes para mañana lo que puedas tratar hoy . fml. 2013; 17(3):3p
Palabras clave (MeSH): Adenocarcinoma, urgencias
Resumen
Las tumoraciones de la piel raramente suponen un motivo de consulta urgente. Sin embargo, si no se actúa sobre ellas, pueden evolucionar, generando morbilidad y complicaciones como sangrado o invasión de órganos próximos. Se debe actuar sobre ellas de una forma precoz, mediante exéresis, crioterapia, electrocirugía, inmunoterapia, etc.
Keywords (MeSH): Adenocarcinoma, emergency
Abstract
The tumors of the skin rarely are a cause for urgent consultation. However, if nothing is done about them, can develop, causing morbidity and complications such as bleeding or invasion of nearby organs. It must act on them in a precocious, by excision, cryotherapy, electrosurgery, immunotherapy, etc..
Introducción
El carcinoma espinocelular o escamoso o epitelioma espinocelular es el segundo tumor cutáneo maligno más frecuente1,2 procede de las células de Malpighi de la epidermis3. Suele localizarse en zonas expuestas al sol, apareciendo sobre cara (labio inferior, mejillas, orejas), manos, brazos, aunque también en genitales y mucosas. En la mayoría de las ocasiones se origina sobre una piel alterada previamente como: dermatitis solares crónicas, queratosis solares o seniles, cicatrices crónicas, queilitis, leucoplasia o radiodistrofias. Aunque es menos frecuente que el epitelioma basocelular (relación 1:10) su crecimiento es más rápido. Su frecuencia es mayor en hombres, debido al trabajo al aire libre, sobre todo en población rural. La edad de presentación es entre 60 y 80 años, incluso inferior en países soleados. Tiene un curso progresivo con capacidad para producir destrucción local y metástasis por vía linfática y sanguínea. Siendo ésta la diferencia fundamental con el basocelular, que habitualmente se trata de un tumor de crecimiento lento (10 años) poco agresivo y que infiltra localmente sin capacidad de metastatizar4.
Caso clínico
Presentamos el caso de una mujer de 88 años con antecedentes personales de demencia vascular avanzada, totalmente dependiente para las actividades básicas de la vida diaria, en tratamiento únicamente con clopidrogel y haloperidol. Acude al servicio de urgencias, remitida desde la residencia por el médico de fsmilis, por presentar sangrado de tumoración localizada en mejilla izquierda.
En la anamnesis, el familiar presente nos informa que la lesión ha evolucionado a lo largo de unos 3 años.
En la exploración se aprecia, localizada en región preauricular-malar izquierda, una lesión tumoral sésil (imagen 1) de 9 cm. de diámetro en su base, de consistencia sólida, coloración eritematosa violácea, con superficie úlcero-costrosa hemorrágica y antro ocupado por una gran formación queratósica a modo de cuerno cutáneo (imagen 2). No se palpa ninguna adenopatía.
Diagnóstico diferencial
El diagnóstico clínico es compatible con epitelioma espinocelular. Suele aparecer como una lesión exofítica, nodular con grado variable de descamación, tendencia a la ulceración de su superficie y al sangrado con facilidad.
El diagnóstico diferencial hay que realizarlo con diversas patologías como queratosis actínica, queratoacantoma, verruga vulgar, enfermedad de Bowen, carcinoma basocelular, queratosis seborreica, disqueratoma verrugoso ,melanoma maligno amelanótico, tumores de Merkel, tumores de folículos de las glándulas sebáceas, sudoríparas ecrinas o apocrinas y de los folículos pilosos terminales4.
Discusión
La paciente, tras la confirmación anatomopatológica de la lesión, recibió tratamiento con Radioterapia local y el equipo de Cirugía Plástica procedió a su resección posterior con plastia.
En este caso, no se había consultado previamente con el servicio de Dermatología hasta el estado tan evolucionado que presentaba. El problema de no actuar sobre este tipo de tumores, en este caso posiblemente por la avanzada edad de la paciente y su calidad de vida dependiente, es el riesgo de complicaciones locales al crecer. Son tumores que sangran al roce, que producen dolor y que infiltran estructuras próximas, pudiendo afectar a ojos, cavidad oral, etc.
Pequeñas lesiones iniciales de escasos centímetros fáciles de tratar, se transforman en pocos años en grandes tumoraciones que generan complicaciones innecesarias y dificultan realizar un acto terapeútico sobre ellas.
Las tumoraciones cutáneas, a menudo infravaloradas en el paciente anciano, deben ser valoradas por dermatología para un tratamiento adecuado y precoz.
Bibliografía
1.- Paul K Buxton. ABC de la Dermatología. 4ª edición. 2003. Barcelona. J&C Ed. Médicas S. L.
2.- Carcinomas espinocelulares. Madrid: Ediciones Aula Médica. 1999: 97-116.
3.- Tratado de Dermatología. Madrid: Ediciones Aula Médica. 1998: 467-484.
4.- Dermatología en Medicina General. Fitzpatrick. 7ª Ed. Madrid: Editorial Panamerica, 2008: 114-130.
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.